
Como ya he mencionado en varias ocasiones, cocinar es una forma muy interesante (lo siento, no he podido resistirme) de que los niños desarrollen habilidades prácticas para la vida. Según María Montessori, el desarrollo de las habilidades de la vida práctica es una de las cuatro vías principales a través de las cuales aprenden los niños pequeños. Cuando los niños pueden participar en actividades de la vida real, ganan en coordinación, motricidad e independencia. Además, estas actividades ayudan a satisfacer la necesidad fundamental del niño de actuar. Para más información sobre las lecciones de la Vida Práctica de Maria Montessori, haga clic aquí.
"Cuando se habla del desarrollo mental, hay muchos que dicen: '¿Cómo entra en juego el movimiento? Y cuando pensamos en la actividad intelectual, siempre nos imaginamos a la gente sentada, quieta, inmóvil. Pero el desarrollo mental debe estar conectado con el movimiento y depender de él. Es vital que la teoría y la práctica educativas se basen en esa idea".
~Maria Montessori, La mente absorbente
Así que sin más preámbulos, aquí está la Idea Montessori Munching de este mes:

Ingredientes:
- 3 1/2 tazas de harina
- 3/4 de taza de azúcar
- 1 1/2 cucharadita de sal
- 5 cucharaditas de levadura en polvo
- 2 huevos
- 1 1/2 taza de leche
- 2/3 de taza de aceite vegetal
- 1 1/2 tazas de arándanos (frescos o congelados, descongelar primero si están congelados y enjuagar suavemente)
Instrucciones:
En un bol grande, mezclar los 4 primeros ingredientes. En un bol mediano, mezclar los huevos, la leche y el aceite. Mezcle los huevos con la harina. Remover hasta que se humedezca, pero sin pasarse, ya que la masa tendrá grumos. Incorporar suavemente los arándanos.
Forre los moldes para mini-muffins con moldes de papel o engráselos bien. Llene cada molde hasta 2/3 de su capacidad. Hornee a 400 durante 10-12 minutos o hasta que se doren por encima. Dejar enfriar 5 minutos y sacar de los moldes. Dejar enfriar completamente.

Glaseado de queso crema
- paquete de 3 onzas de queso crema normal
- 1 cucharadita de vainilla
- 1 taza de azúcar en polvo
Mezclar todos los ingredientes. Batir hasta que quede ligero y esponjoso.
Separa el glaseado en 3 o 4 cuencos para diferentes colores. Deja que los niños decoren con caramelos, bayas o lo que sea; ¡no te puedes equivocar! Que aproveche.