10 cosas que hacen grande a un centro preescolar
Como padres, todos hemos oído mensajes pesimistas sobre la calidad de la educación infantil en la actualidad. Pero aquí está la buena noticia: preescolares en todas partes están mejorando todo el tiempo. Hay que admitir que si en el Authentic Institute of Montessori pudiéramos hacer lo que quisiéramos, probablemente convertiríamos cada centro preescolar del mundo en una escuela Montessori (una auténtica escuela Montessori, para ser precisos). Pero lo que realmente queremos es que cada niño tenga una gran educación y, por lo tanto, un gran comienzo en la vida.
Así que, si tu hijo tiene seis años o menos y estás buscando el centro preescolar perfecto, aquí tienes algunas cosas que debes tener en cuenta.
10 cosas que hacen grande a un centro preescolar:
1.) Su hijo tiene libertad de movimientos la mayor parte del tiempo. Ya sea jugando, trabajando con materiales o interactuando con otros niños, no se espera de él que permanezca sentado en silencio durante largos periodos de tiempo.
2.) Su hijo participa en actividades, juegos o lecciones, en lugar de deambular sin rumbo.
3.) Que tu hijo tenga acceso a una variedad de actividades o materiales distintos y libertad para elegir lo que más le interese. No debe limitarse a hacer lo mismo todos los días a la misma hora.
4.) Los profesores pueden dedicar tiempo a trabajar con niños individuales o en pequeños grupos durante el día. La clase no debe estar agrupada en conjunto todo el tiempo.
5.) Las aulas deben estar ordenadas y ser atractivas, ya que los niños necesitan orden y belleza. Incluso los niños más pequeños pueden y deben participar en el mantenimiento de su entorno.
6.) Además de la lectura y las matemáticas tempranas, el plan de estudios de tu hijo debe incluir el aprendizaje sobre la naturaleza, los animales y las plantas, actividades de la vida real como preparar la comida o guardar los materiales, y técnicas de autocuidado como lavarse las manos o ponerse el abrigo o los zapatos.
7.) Su hijo debe disponer de periodos de tiempo prolongados e ininterrumpidos para concentrarse en actividades o jugar.
8.) Las hojas de trabajo se utilizan poco o, en el mejor de los casos, nunca.
9.) Tu hijo debe pasar tiempo al aire libre todos los días.
10.) El plan de estudios debe ser flexible. Tanto si su hijo es una superestrella de la lectura como si prefiere trabajar con números, el aula debe adaptarse a la trayectoria y el ritmo de aprendizaje individuales de cada niño. No hay que esperar que todos los niños aprendan lo mismo al mismo tiempo.
Lo más importante es que a su hijo le guste ir a la escuela. Por supuesto, hay que contar con cierta reticencia al principio de todo. Pero tras un periodo inicial de adaptación, su hijo debería estar deseando ir al colegio, no quejarse ni actuar como si le diera pavor ir. Si éste es el caso, quizá sea el momento de buscar otro colegio.
